El anonimato, la no percepción directa e inmediata del daño causado y la adopción de roles imaginarios en la Red convierten al ciberbullying en un grave problema.
Las formas que adopta llegan ser muy variadas y sólo se encuentran limitadas por la habilidad tecnológica y la imaginación de los menores acosadores, lo cual es poco esperanzador. Algunos ejemplos concretos podrían ser los siguientes:
• Colgar en Internet una imagen comprometida (real o efectuada mediante fotomontajes) datos delicados o privados, cosas que pueden perjudicar o avergonzar a la víctima y darlo a conocer en su entorno de relaciones publicas.
• Publicar, con foto incluida, a la víctima en un web donde se trata de votar a la persona más fea, a la menos inteligente… y cargarle de puntos o votos para que aparezca en los primeros lugares.
- Hacer circular rumores en los cuales a la víctima se le suponga un comportamiento reprochable, ofensivo o desleal, de forma que sean otros quienes, sin poner en duda lo que leen, ejerzan sus propias formas de represalia o acoso.
- Enviar menajes amenazantes por e-mail o SMS, perseguir y acechar a la víctima en los lugares de Internet en los se relaciona de manera habitual provocándole una sensación de completo agobio. Entre otras
No hay comentarios:
Publicar un comentario